jueves, 2 de agosto de 2012

Lucas. La Bota. Pedriza.



Después de ascender por la vía Teógenes, al rapelar me fijo en esa fisura desplomada. Justo antes de llegar a la cima, me asomo y veo a una ardilla que me mira fijamente. Tiene la cola muy tupida, es marroncilla con cara de avispada. En unos momentos se cruzan nuestros ojos, y aunque parezca una tontería noto que se ríe de mí. Se da la vuelta, se coloca boca-abajo y agarrada tranquilamente destrepa el desplome y la veo desaparecer. Pasados unos minutos, una gota de sudor se desliza entre mi frente y el casco; intentando yo, subir por ese desplome. ¡Qué absurdo! Si un animal ha bajado "plácidamente caminando" por el desplomazo, ¿Qué hago yo aquí penando? Una vez más la naturaleza ha dotado de medios a los que de verdad les hacen falta. A mí, me regalaron unos Camalots y unos guantes de fisura que también está muy bien.



La vía la abren Antonio Ayuso, Ignacio Lucas y Antonio Flores en 1958 utilizando medios de progresión artificial (Tino me contaba ayer que sacaba los tacos de madera con la mano). Datos que puedo comentar gracias a la para mí ya indispensable guía de La Pedriza "Vías conocidas y desconocidas" de Tinito Núñez. El mismo Tino, libera la fisura para escalada libre en Abril del año 1993, mientras yo andaba en pañales y sin tener ni idea de lo que es un cerrojo de manos.

Humildemente no puedo decir mucho de la vía, está allí y es espectacular. No entra ninguna gana meterse en faena porque está negra y desplomadamente tenebrosa. Aunque con la anécdota de la intrépida ardilla me animo. ¿Quién sabe cuando volveré a subir la cansada cuesta?



La combinación que propongo a los repetidores no es la clásica propiamente ascendida. El segundo largo es un desplome en el que hay que traccionar de un clavo mugriento y encima subirse a los hombros del compañero. Veo mucho más útil para la escalada libre salir por el techo a la derecha con unos bonitos empotramientos de manos en una fisura horizontal que desemboca en la vía Teógenes. Mucho más recomendable y menos estresante. Cada uno que suba por donde quiera, claro está, es una recomendación.



Un juego de Camalots del 1 al 4 con el nº 2 repetido y algún Totem Cam serán suficientes para recorrer (en mi caso con más pena que gloria) éste duro itinerario. Con lo bien que se está en Patones con nuestras amigas.


Una vía más, para los Pedriceros aguerridos y los más tranquilos que prefieran subirla en un A2 no por ello menos gratificante. Respeto por todos.

Ya saliendo con temblores y mi compi haciendo la foto.